martes, 24 de junio de 2008

Número 3: Desesperación de Vladimir Nabokov


Vladimir Nabokov fue el autor de una de las novelas más controversiales del pasado siglo XX: Lolita.

Nunca me han gustado las adaptaciones fílmicas de la mencionada obra. Para empezar porque creo que los directores no han entendido bien al personaje principal: Humbert Humbert.

Pero, como nunca he terminado de leer Lolita y este post es acerca de Desesperación, obviemos a la primera y dediquémonos a la segunda.

En Desesperación nos encontramos con otro protagonista cuya inicial es la H: Hermann. Uno de los personajes más interesantes que me haya encontrado. Generalmente yo uso una frase con ciertas amistades mías y personas que conozco, "yo lo pienso y vos lo decís", en el sentido de que hay cosas que se nos ocurren en común pero que nunca me atrevo a decir y ellos sí. Con Hermann esto va más allá, yo ni siquiera me atrevo a pensar lo que él concibe.

A pesar de lo chocante que puede ser para mí, me encuentro fascinado ante su cinismo, porque a lo mejor pienso que es el resultado del absurdo, de la estupidez humana circundante. Y en estos pensamientos ya vislumbro las ideas de Camus en "El mito de Sísifo" que comencé a leer unos días atrás, pero supongo que no estoy plagiando sino promocionando sus ideas, bien reconocidas.

Lo que más me gusta de Nabokov es su inteligencia, sus juegos lógicos, la forma en que crea y recrea. Lo que menos me gusta de las adaptaciones de su obra Lolita, que he visto en la pantalla plateada, es, por ende, exactamente lo opuesto, la carencia de inteligencia, la falta de comprensión de personajes fascinantes que son representados como vulgares dementes o pervertidos.

En el prefacio que preparó para la edición en inglés, Nabokov mencionaba que Desesperación fue una de sus primeras novelas y la traducción al idioma anglosajón un reto personal. Decía asimismo que era la novela menos rusoblanca de las suyas y la de lenguaje más sencillo (en esto no estoy de acuerdo, quizás fuera de lenguaje sencillo para los entes despiertos, pero para un servidor fue una odisea seguirlo, algo que me complace porque no es que la novela esté mal escrita, al contrario, está genialmente realizada y es simplemente compleja... al menos para mí...).

Cierro citando a Nabokov en el mencionado prefacio en un comentario que hace en réplica al afamado y "muy respetado y respetable" (este último entrecomillado lo agrego yo, no es opinión de Nabokov sino mía) Jean Paul Sartre, ampliando acerca del hecho de que este libro (Desesperación) "posee menos atractivo Blanco-Ruso que mis otras novelas de emigrados": "Esto no impidió que un comentador comunista (J. P. Sartre), quien dedicó en 1939 un artículo notablemente estúpido a la traducción francesa de Desesperación, dijera que 'tanto el autor como el personaje principal son víctimas de la guerra y la emigración'..."(1)

(1) Nabokov, Vladimir. Desesperación. Luis de Caralt Editor. Sin número de edición. Barcelona, 1969. p. 9

1 comentario:

Unknown dijo...

Jean paul satré jajaja que pobre imbecil.