Número 59: Continuando con lo de la vez pasada (cuatro años después)

Y, continuando con lo de la vez pasada...

Sé que no estamos en Las Aventuras de Petoulqui, pero... en el capítulo anterior, nuestro protagonista se encontraba leyendo E.T. de William Kotzwinkle, y había mencionado algo acerca de La Regenta de Clarín. Pues bien...

La lectura de E.T. ha llegado a su final, con mucha satisfacción, aquella que surge de haber leído un buen libro, en este caso novela. Realmente, el autor, William Kotzwinkle, le sacó el jugo a esta naranja (hablando de naranjas, hace pocos días me encontré un video en Youtube con el famoso y extraviado capítulo 21 de La Naranja Mecánica de Burgess...), con resultados realmente fantásticos (qué paradójico, bien podría ser "fantásticamente reales"). Y habiendo terminado con E.T., me dieron ganas de leer uno de los dos ejemplares que tengo de GALACTICA de Glen A. Larson y Robert Thurston. Y en eso estoy, en parte, en leer acerca de la astronave de combate y sus archienemigos: los cylones.

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Esto seguramente lo escribí en 2016, pues terminé de leer E.T. en marzo de ese año, y La Regenta fue el último libro de junio (¿es necesario aclarar que del mismo año?), y como escribí "Y, continuando con lo de la vez pasada...", tuvo que ser apenas unos días después.

¿Y qué pasó? ¿por qué tardé tanto en terminar de leer La Regenta? Bueno, pues, aparte de que soy un lector muy lento (ya lo he dicho antes por aquí. En el blog, no en esta entrada), también está el hecho de que ese año me metí a leer La trilogía bananera (experiencia que cambió radicalmente mi perspectiva sobre la obra de Asturias). Recuerdo esa mañana, debió ser un sábado o un domingo de marzo (o quizás abril porque Viento fuerte fue el último libro de marzo) cuando me vi ante la disyuntiva de leer ya fuera Hombres de maíz o El Papa Verde. Como se imaginarán elegí esta última, lo cual aplazó Hombres de maíz hasta finales del año pasado. La lectura de El Papa Verde se extendió hasta abril, y Los ojos de los enterrados abarcó desde ese mes hasta junio, cuando pude retomar La Regenta.

No sé si lo imaginan pero, nunca terminé de leer GALACTICA.